Elegimos este tema a modo de ejemplo concreto de lo dicho en el artículo anterior.
"El Proceso Fisher Hoffman" fue elaborado en Palo Alto (California) y publicado en Estados Unidos en 1967 por el psiquiatra Bob Hoffman y transmitido por el sastre Fisher. Según su teoría, siguiendo el método de "el proceso", y utilizando diversas técnicas complementarias, se puede lograr la toma de conciencia correcta para la transformación de los condicionamientos negativos paterno-maternos adquiridos en la vida adulta y conseguir lo más genuino de nosotros mismos.
Claudio Naranjo formó parte del primer equipo de "Esalen Institute", centro vanguardista de la psicología experimental y escuela pseudomística del movimiento New Age. Fundó una organización basada en la práctica del "Proceso Fisher Hoffman", la Escuela de Creación y Formulación de Futuro; introdujo el término "Proceso de Quadrinidad" al introducir pequeñas variantes al método o proceso original. El Ministerio del Interior de España reconoce este grupo como "Asociación Humanista para la Armonía y el Desarrollo". Claudio Naranjo también imparte cursos de "rebirthing" y terapia gestáltica.
El curso intensivo de "Quadrinidad" se divide para trabajar cuerpo, intelecto, sentimiento y espiritualidad. El proceso promete unir las diferentes partes del ser humano en una totalidad, la llamada "cuadrinidad". Los cursos intensivos tienen una duración aproximada de 7 días y los participantes deben salir de ellos como "seres humanos completamente nuevos". A puerta cerrada, en casas apartadas, el equipo de terapeutas conduce a los participantes en grupos entre 15 y 20 personas por un proceso psicoterapéutico.
Resulta disparatado hacer en siete días un proceso de renovación que requiere un proceso mucho más natural, con mucho más tiempo y profundas comprensiones íntimas, no traumatizantes, para transformar las emociones negativas de la infancia y de la adolescencia. No se puede sacar así un ser humano nuevo. Este método entraña ejercer violencia psíquica sobre los participantes, lo cual entra en el terreno de lo delictivo. Lo mismo se debe decir de las dudosas terapias de psicología de las "constelaciones familiares" y de la psicología transpersonal.
Todos estos "cursos crash" ('to crash'= destruir, hacer pedazos) pueden tener consecuencias graves para los participantes como el colapso total o crisis psíquicas que aparecen hasta meses después de realizar un curso de estos, como hemos visto en el artículo anterior de este blog.
Los elementos que se utilizan para manipular a los asistentes son la falta de sueño, la poca nutrición y el duro ejercicio físico, que reducen considerablemente la capacidad de autoafirmación y de crítica. De este modo, el participante se hace muy receptivo a las sugerencias que reciben de los terapeutas. También diferentes recursos trasladan al participante a un estado pseudoinfantil de miedo y de dependencia.
Reducida su capacidad crítica y agotado psíquicamente, el participante es utilizado para sugerirle una nueva imagen propia orientada al éxito. Crean para él una euforia de cambio con las expectativas de que todo será diferente después del curso. Utilizan diferentes psicotécnicas que sustentan la esperanza de un cambio a fondo. Estimulan (manipulan) los sentimientos positivos. Después del curso, se exige la unidad del grupo mediante reuniones o cursos de complemento, y se alienta a que los participantes recomienden los cursos a sus amigos o compañeros.
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http://red-alerta-nuevas-terapias.over-blog.es/2015/01/el-proceso-hoffman-jugango-peligrosamente-con-nuestra-mente-dossier.html
No hay formación mínima y suficiente de sus "instructores" o "facilitadores". La mayoría son personas que tan sólo han pasado el programa y se dedican a reaplicarlo sin atender las diferencias individuales entre las personas, por eso los instructores no cuentan con ninguna profesionalidad acreditada oficialmente. No hay evaluación psicológica previa alguna, ni tampoco contraste con otras modalidades de "coaching", la bondad del sistema se sostiene por "numerosos testimonios de personas que pasaron la experiencia". La evidencia no está contrastada por ningún Colegio Profesional de Psicología.
