jueves, 30 de enero de 2020

SECTA CEIS

En el caso del gurú Vicente Lapiedra (líder de CEIS), un informe policial indicaba que entre 1979-1984 "los gastos atribuibles a Vicente Lapiedra hacen un importe total de 25.439 354 pesetas".

El lujoso piso en que habitaba estaba comprado a partir de créditos bancarios pedidos por sus adeptos y por el fruto de las actividades de estos ejerciendo la prostitución o el intrusismo profesional en psicología. El piso es suyo, aunque esté legalmente registrado a nombre de uno de sus líderes de confianza. Vicente Lapiedra no tiene nada, pero gasta dinero a manos llenas en casinos y bingos.

En CEIS se utiliza la prostitución como medio de aportar dinero al grupo, es decir, al líder. El proceso se inicia "superando las inhibiciones sexuales" acostándose de "forma terapéutica" con quien indica el guía. Luego se añade a la "liberación" el tener que mantener relaciones homosexuales "para romper tabúes" -en realidad es porque los dos gurús más importantes de CEIS son homosexuales-, se sigue con las "convivencias de fin de semana" en las que, entre otras cosas, se sortean los distintos compañeros de cama y se acaba ejerciendo la prostitución en pubs barceloneses o a través de anuncios en la prensa diaria. Las adeptas justifican la prostitución diciendo que es para "combatir el machismo". ¿Se dan cuenta de hasta qué punto es rentable el lavado de cerebro?

(Pepe Rodríguez)