viernes, 16 de marzo de 2018

MACHISMO EN LAS SECTAS

TESTIMONIO. EXPERIENCIA DE UNA MUJER CON LOS TESTIGOS DE JEHOVÁ (III) (continúa la entrada anterior)

Parte de los comportamientos de los individuos dentro las sectas se refleja en la tercera parte de este testimonio.


En este tiempo pude ver las cosas con más realismo y no con tanto romanticismo como cuando entré. Comencé a observar las relaciones de los testigos: las mujeres son nulas, estaban idiotizadas, sumergidas y contentas en unos papeles de sumisión que a veces rayaban el ridículo, eran incapaces de vivir por ellas mismas: estaban sujetas al padre o al marido. Sin embargo, era un papel bastante cómodo, ya que en el hombre descansaba toda la responsabilidad y las consecuencias de las grandes decisiones.

Existía cantidad de solteras deseosas de que llegaran las Asambleas –a las que acudían estrenando vestidos, peluquería y complementos-, porque allí radicaba la única esperanza de cazar marido; ya que no les está permitido casarse con nadie de fuera y había tanta mujer en edad casamentera y tan poco hombre libre, que esto se llegó a considerar un verdadero problema.

He visto muchachas jovencísimas casándose con el único soltero de la congregación y después de no más de unos meses de relación por temor a caer en la tentación de actos impuros. Con el concepto de actos impuros califican el darse un beso o acariciarse cuando dos personas se quieren, pero no tienen firmado ningún contrato ante un juez.

He visto también a madres quitando de estudiar a sus hijas para librarlas del contacto con mundanos, hijas llorando porque quieren hacer una carrera o una diplomatura y no meterse en casa a limpiar y hacer comidas. Lo más que se les permite a las más rebeldes es hacer algo de puericultura, peluquería o esteticien, algo que las mantenga ocupadas hasta que llegue el hombre que las meta en casa para toda la vida y las carguen de hijos.

A los hijos varones se les quita de la cabeza la idea de hacer carrera, pero estos como están destinados a mantener a sus mujeres e hijos pues siempre se les anima a hacer alguna formación profesional: electricista, mecánico, etc. Normalmente todos son arrancados del colegio al terminar la primaria, aunque he visto profesores personarse en casa de padres testigos de Jehová para rogarles que dejen a sus hijos seguir estudiando porque pueden sacar provecho de cualquier vocación universitaria, y todo lo que han recibido como respuestas son esas sonrisas “sabias” que le hacen saber que es un agente de Satanás que viene a perder a sus hijos.

Las niñas especialmente son tronchadas de cualquier opción profesional para ponerlas a dar vueltas por las calles predicando la Biblia, ya que, como queda tan poco tiempo para el fin, les hacen saber que esto de predicar gratis es un privilegio para ellas, algo que no se repetirá jamás en la historia. Así han desperdiciado muchas desgraciadas su juventud. Si alguna joven a pesar de todo sigue estudiando, ésta está mal vista por toda la congregación, que la considera más interesada en las cuestiones materiales que en las espirituales. Esto hace que a lo largo de los años se haya creado una masa de mujeres bastante analfabetas, que solo son eruditas en la Biblia, pero que no están al día de nada de lo que ocurre alrededor, y están ancladas, sumisas, estáticas…, porque todo lo que no sea de la biblia procede de Satanás. Llegan a ser personas embrutecidas, con un solo punto de vista de las cosas y de las situaciones.

Vi también los chismorreos y rencillas subterráneas que se tenían los hermanos, las rivalidades entre las familias, familias con hijos que habían criado en su verdad, pero que los hijos no la tenían en el corazón y aguantaban por sus padres y por el miedo de no ser destruidos como en los días de Noé.

Vi también mujeres deprimidas porque sus maridos estaban opuestos a los testigos de Jehová y su unidad familiar se había roto.

Vi también hijos traumatizados en familias separadas a causa de la religión, de ver a su madre fanatizada y al padre opuesto, amargado y solo.

Vi también a ancianos que tenían a sus hermanos favoritos, esos que siempre contestan en los comentarios de la Atalaya, a los que les da las mejores asignaciones, los ejemplos de virtudes en la congregación.

Vi también a testigos de Jehová empresarios tener empleados a hermanos sin oficio ni beneficio, parados de la sociedad, casados y con hijos, pero pagándoles una miseria de sueldo mientras ellos se hacían cada vez más pudientes.

Fueron seis años, y sería muy largo de contar aquí lo que se esconde detrás de esos primeros días que llegas al salón y te ves inmersa en esa acogida de besos, apretones de manos y bienvenidas con sonrisas de anuncios.


Video Víctimas de la Watchtower 

Video Víctimas de la secta Osho

Humana-ong-secta-criminal-transnacional