viernes, 23 de octubre de 2015

LA SECTA OSHO

En 1985, Bhagwan Shree Rajneesh fue deportado después de declararse culpable de fraude inmigratorio y de arreglar falsos matrimonios para que sus seguidores extranjeros pudieran permanecer en Estados Unidos (la secta se había adueñado del pueblo de Antelope y había hecho lo que había querido en él). Luego, se puso en evidencia un plan nunca puesto en práctica para asesinar a un funcionario del gobierno que era crítico del grupo. Sally-Anne Croft y Susan Hagan salieron de la cárcel tras cumplir dos de los cinco años a que fueron condenadas por conspirar para asesinar al fiscal Charles Turner en 1985.

La ciudad de Rajneeshpuram en Oregón contaba con su propio ayuntamiento y con todos los servicios de una ciudad. Desde 1983, ya no fue legalmente una ciudad, al no respetar la prohibición constitucional de separación entre Iglesia y Estado.

Rajneesh obtenía una elevada fuente de ingresos a través de donaciones parciales o totales de las fortunas personales de los adeptos. En esta secta, el nivel económico y cultural de los miembros es elevado y se destacan ricos herederos y algunos miembros de la nobleza europea, según el experto Pepe Rodríguez.

Otra fuente de ingresos, entre otras muchas, era por el elevado número de turistas que iban a Rajneshpuram, y por el dinero que debían pagar los adeptos para peregrinar allí a ver a su "dios".

Bhagwan Rajneesh, más conocido por Osho, saltó a la fama en la década de 1980 por poseer un parque móvil de 36 Rolls Royce, y arrastró con sus creencias demagógicas a millares de personas.

En un documental de la Australian Broadcasting Corporation se aseguraba que seguidores de Bhagwan Rajneesh a mediados de los años de 1980 popularizaron el uso del MDMA (éxtasis) en Europa, a donde la exportaron tras ser arrestados y expulsados del "ashram" de Oregón por el gobierno de Estados Unidos, entre otras razones por tráfico de armas. Para los "sannyasins" el éxtasis representa una herramienta espiritual. Su relación con el mundo de las drogas y laboratorios clandestinos también se investigó en Ibiza, desde donde se extendieron por Mallorca y España.

El Parlamento francés, el Parlamento europeo, el Gruppo di Ricerca e di Informazione sulle Sette, expertos y organizaciones no gubernamentales califican de "secta especialmente peligrosa" a la secta de Osho. Ésta ya se ha transformado en un poderoso grupo económico y religioso. Disponía en los años 1980 de sus propias líneas aéreas, cadenas de hoteles, saunas, discotecas... La mayoría de los "sannyasins" sienten devoción por Poona, en la India, comuna internacional de Osho, lugar de peregrinación también para los sedientos de  captar la nueva moda de los centros de "crecimiento personal", para los "progresistas" en los que se amalgama incoherentemente izquierdismo, yoguismo, ecologismo, etc.

La comuna de Poona es descrita por este grupo como un experimento en la creación del Nuevo Hombre. A sus adeptos y a los neófitos les ofrecen programas diseñados para ayudar a descubrir las capacidades de meditación y programas de crecimiento personal y autodescubrimiento.

También tienen experiencias sexuales dentro del ambiente libertario de Poona. Rajneesh dice ser renovador del Tantra, cuando en realidad no ha sido más que otro de sus mixtificadores. Como dice Pepe Rodríguez, experto en sectas, Osho manipuló la unión sexual mística de la tradición hasta convertirla en promiscuidad sexual. Este es uno de sus ganchos demagógicos. Cuando vuelven a su lugar de origen, vuelven profundamente cambiados psíquicamente y llegan a tomar nombres sánscritos.

Aunque Osho falleció en 1990, el imperio comercial creado por él no ha desaparecido. El grupo Osho International Foundation controla mundialmente la venta de los artículos relacionados con Osho, así como los viajes que se realizan a Poona y otras muchas actividades empresariales. El nombre de sus seguidores, "sannyasins", significa en sánscrito asceta, monje, el que vive en la renuncia total. En contradicción, los "sannyasins", de gran solvencia económica, suelen ser dueños de las tiendas especializadas donde se venden libros con las máximas de Osho, libros sobre su vida, audiovisuales con sus sermones, barajas y decenas de artículos. También ofrecen clases de meditación, viajes, cursos de armonización de los centros energéticos, y dentro de su léxico se hallan los términos: yoga, biodanza, terapia neoreichiana, "rebirthing", colorpuncture, "craniosacral balancing", arun, danzas sagradas de Gurdjieff, etc.

Un punto de atracción para el occidental es que Rajneesh intelectualiza con brillantez la religión. Utiliza como base fragmentos de todas las religiones, filosofías, métodos terapéuticos y de crecimiento personal (especialmente, los derivados de Gurdjieff y las distintas psicologías humanistas) y los manipula dándoles una interpretación uniforme que juega a su favor. Pero se contradice continuamente hasta el punto de que el rechazo de todo contenido doctrinal se erige en sistema.

Los mensajes de Osho han contribuido dañinamente a introducir en la sociedad un relativismo moral y un eclecticismo ideológico donde todo tiene cabida. Esto mismo se puede observar, por ejemplo, en unos comentarios del líder Bhagwan Shree Rajneesh en una ceremonia de iniciación donde daba a cada discípulo un nuevo nombre. Leer lo que dijo Rajneesh puede dar sensación de que las palabras pueden hacer que una persona entre en un trance ligero o en un letargo.

"Primero, la foto no es mía. La foto sólo parece ser mía. Ninguna foto mía es realmente posible. En el momento en que uno se conoce sabe algo que no puede pintarse, describirse, enmarcarse. Existo como una vacuidad que no puede representarse, que no puede fotografiarse. Por eso no pude poner la foto ahí... Cuanto más conozcan la foto..., cuanto más se concentren en ella, más armonizarán con ella..., sentirán más lo que digo. Cuanto más se concentren en ella, la foto irá desapareciendo."

El mensaje no es lógico y uno no puede seguirlo lógicamente, pero es presentado como si fuera lógico. Es un método de inducción de trance. Tratar de seguir  lo que se dice puede separar efectivamente al oyente de la realidad. Rajneesh capitaliza el modo en que, igual que en algunos juegos de niños, por lo común las palabras pierden significado por la repetición y al final inserta la sugerencia, esto es, el elemento que manipula la mente.

La influencia de Rajneesh pesa en todas las comunidades Osho como una losa, y se acatan hasta las más extravagantes órdenes de Bhagwan, aunque afecten a los aspectos más íntimos del individuo.

Otro asunto preocupante es que algunas personas relacionadas con la secta -y que utilizan las mismas técnicas- están abriendo centros que operan bajo nombres extraídos de la psicología humanista y son difíciles de detectar.